Las redes sociales en el trabajo del detective privado.
Vamos a dedicar esta entrada del Blog a un tema muy interesante en la labor del detective privado: el uso de las redes sociales como herramienta de trabajo. En este blog ya hemos hablado de las nuevas tecnologías, como en la entrada titulada el Uso las nuevas tecnologías en el ámbito del trabajo y también hemos dado algunos consejos para proteger nuestra privacidad.
La revolución de las nuevas tecnologías en nuestras vidas.
Las nuevas tecnologías suponen para el detective privado una interesante herramienta de trabajo y las redes sociales son una valiosa fuente de información, siempre respetando la legislación vigente. Las nuevas tecnologías han impactado en nuestro entorno con avances continuos. Además, las innovaciones tecnológicas introducidas sobretodo de la mano de Internet, son irreversibles.
La revolución de las nuevas tecnologías afecta a múltiples aspectos de nuestra vida e incluso al propio Estado de Bienestar. Tanto es así que actualmente, cuesta trabajo pensar en algún ámbito de nuestra vida en el que no estén presentes las nuevas tecnologías directa o indirectamente. La mejora en el intercambio de información, en los servicios y en la gestión de recursos es indiscutible. Pero el contrapunto está en también ha supuesto una disminución de nuestra privacidad. Es un hecho que utilizadas inadecuadamente las tecnologías de la información y el conocimiento (TIC), pueden vulnerar derechos protegidos por la Constitución, como sucede con el reflejado por el Artículo 18.1 de la Constitución española (el derecho a la intimidad personal y familiar) y el recogido en el punto 3 de este mismo artículo (el secreto de las comunicaciones).
Fuente: Flickr
¿Qué son las redes sociales y cómo vulneran la intimidad?
Su propio nombre lo indica: son estructuras sociales formadas por nexos entre usuarios o grupos de usuarios conectados por uno o varios tipos de relaciones. Estas relaciones pueden ser profesionales, amistosas, familiares o puede que simplemente estén basadas en intereses comunes. Estos usuarios pueden ser particulares, empresas, entidades u otro tipo de organizaciones que se entrecruzan y tejen una red.
Su carácter virtual es otro elemento que define a las redes sociales. En las redes sociales cada usuario tiene un perfil público, un espacio personal virtual donde ofrece datos personales, fechas, ubicaciones, fotos sobre sí mismo y sobre otras personas. Además permite interactuar con otros usuarios, sin embargo esos usuarios son virtuales: no sabemos realmente si es un perfil falso. Si bien su origen real se sitúa a mediados de los años 90 del s. XX, es desde el 2003 cuando se dispara su uso con la creación de MySpace y Facebook. Con la creación en 2006 de Twiter su impulso y popularidad son imparables. Así, van surgiendo nuevas redes sociales de distinto tipo según su temática o su finalidad.
Ya hemos indicado que las redes sociales parecen vulnerar la protección de datos de carácter personal, aunque sean los propios usuarios quienes voluntariamente publiquen sus datos personales. Sin embargo, suele suceder que al mismo tiempo publican información sobre terceros, ya sea a través de su propio perfil o mediante comentarios en otros perfiles. La Constitución protege el derecho de toda persona a la intimidad personal y familiar. Así el fundamento mismo de una red social, tal y como lo entendemos hoy en día, significa la renuncia del usuario a parte de su privacidad. Aunque esta renuncia es voluntaria, realmente esa voluntariedad viene limitada los por términos y condiciones de uso establecidos por cada red social.
Por otro lado, puede suceder que estos datos personales gestionados por la red social sean traspasados o cedidos a terceros con fines diversos (acciones de marketing directo, servicios de hosting, servicios de almacenaje…). También es necesario añadir que las redes sociales publican textos legales relativos a la protección de datos, con el fin de informar y asesorar a sus usuarios. Sin embrago, esos textos legales no resultan muy comprensibles para la mayoría de los usuarios y se aceptan los términos establecidos por la red social por defecto. Además, en ocasiones, esos textos legales no aparecen en lugares accesibles y de fácil localización.
Finalmente no podemos olvidar que las principales redes sociales utilizadas en España gestionan el tratamiento y control de datos personales fuera nuestro país o incluso fueran de la Unión Europea. En ocasiones sucede que ese tratamiento se desarrolla en estados o países que no cumplen con los requisitos de seguridad exigidos por la legislación nacional, según la Agencia Española de Protección de Datos.
Facebook como fuente de información personal.
El Facebook se ha convertido en la red social favorita para muchos internautas y su grado de crecimiento ha sido exponencial, alcanzando los 100 millones de usuarios. En su muro personal los usuarios exponen sus datos de contacto, edad, su formación, ciudades donde han residido, viajes y además, publican sus experiencias, gustos y preferencias, familia, amistades, fotos, vídeos… Así, Facebook se ha convertido en una gran fuente de información para cualquier particular, empresa.
En Facebook, junto con los datos del perfil, destaca el aumento de las herramientas y aplicaciones que facilitan la publicación de material gráfico, ya sean vídeos o fotografías. Otro elemento destacado de esta red social es el alcance y la rápida expansión de sus contenidos. Compartidos y comentados por cientos de usuarios, estos contenidos adquieren carácter viral. Por ello siempre debemos tener en cuenta que, una vez publicado, su difusión es incontrolable, haciéndose accesibles a miles de personas.
Como adelantábamos anteriormente, igual que ocurre con el Messenger o el WhatsApp, no todo el mundo que nos contacta en Facebook, tiene por qué corresponderse con un amigo real. De hecho puede que su perfil sea completamente falso o bien que su perfil haya sido suplantado.
Mucha gente descuida la información que facilita en Facebook o en otras redes sociales y datos como su teléfono, domicilio, lugar de trabajo, datos de familia aparecen como información accesible a todo el mundo. Facebookde una avanzada plataforma para configurar el nivel de visibilidad y accesibilidad de nuestros datos y publicaciones. De este modo podremos delimitar el acceso únicamente a quien nosotros queramos.
Las redes sociales como herramientas para los detectives privados.
Cualquier profesional se ha adaptado a las nuevas tecnologías y entre ellos los detectives privados: página web, Facebook, blog… Pero además, como investigadores podemos emplear las redes sociales como una herramienta más para obtener información en nuestro trabajo. Así, por un lado podemos investigar si se han cometido posibles irregularidades en estas plataformas (como ciberbulling), y, por otro lado, podemos emplear esas plataformas para obtener información sobre nuestros investigados.
Pero por otro lado, no debemos olvidar que cualquier tipo de acceso no autorizado a las comunicaciones privadas de un tercero es ilegal, de modo que no podemos acceder al contenido de whatsapps, emails, mensajes, etc. sin autorización de alguno de los emisores o destinatarios. En el caso de las redes sociales estamos hablando de acceder a los datos publicados en perfiles públicos y sólo un Juez tiene potestad para ordenar la intervención de las telecomunicaciones. Por lo tanto, no podemos realizar una investigación con la observación de la actividad telemática.
En primer lugar, las redes sociales pueden ser muy útiles en la investigación de casos de infidelidad. Como ya indicamos en nuestro post Las infidelidades, la historia que siempre se repite, el detective privado puede realizar un seguimiento de la actividad del investigado en Internet, en las redes sociales en las que éste participa con un perfil público: foros, chats, Twiter, Facebook, Instagram, etc. En estas plataformas sí que podemos realizar una investigación de sus inserciones, de las personas con las que chatea, a las que comenta y las que le comentan, las que enlaza, las fotos en las que aparece y con quién aparece, etc.
En segundo lugar, las redes sociales pueden ser muy útiles en las investigaciones de fraudes laborales en los que los empleados fingen bajas por enfermedad. Como vimos en nuestra entrada titulada
El fraude laboral, a pesar de estar de baja fingida no pocas personas cometen el fallo de publicar información poco apropiada sobre actividades que están realizando mientras están de baja; muchas de estas actividades son incompatibles con una baja: fiestas, viajes, deportes… Así, gracias a redes sociales como Instagram o Facebook, los investigadores privados podemos obtener pruebas publicadas por el propio investigado. Sin salir del ámbito laboral, pero en otra línea de investigación, las redes sociales también pueden ser consultadas en las investigaciones prelaborales, que en ocasiones pueden revelar un perfil distinto al ofrecido en el curriculum entregado por el candidato.
Fuente: Audiencia Electrónica
Por otro lado, el detective privado también afronta casos sobre conductas irregulares cometidas en Internet y a través de las redes sociales. Ya dedicamos un post a examinar los distintos
Tipos de delitos informáticos y dentro de ellos dedicamos un apartado a los “Delitos contra la intimidad y el honor”. Desde casos de ciberbulling, que son los más conocidos, hasta el on-line grooming, pasando por el ciberstalking o el más extendido sexting. En estos casos los detectives se centran en recopilar toda la información que plasme esa conducta de acoso, chantaje en las redes sociales y la ponemos a disposición de nuestros clientes, de cara a que puedan denunciar esta situación.
Fuera del ámbito de la investigación técnica, sobra decir que las nuevas tecnologías han ampliado y facilitado las posibilidades de comunicación entre el detective y su cliente: correo electrónico, Skype, chats, plataformas de mensajería instantánea, etc… Todas estas herramientas son empleadas con el nivel de seguridad adecuado para que la confidencialidad y privacidad queden completamente aseguradas. Además, también debemos señalar que gracias a Facebook y a blogs, como es el caso de Elche Detectives & Asociados, el detective puede dar a conocer su profesión y acercar su trabajo a la gente. De este modo podemos difundir nuestro trabajo y los ciudadanos pueden saber todos los aspectos en los que un detective puede ayudarles.
Como en cada post de nuestro Blog Elche Detectives , ante cualquier duda siempre es aconsejable consultara los expertos: detectives profesionales, informáticos forenses… Su colaboración nos ayudará a detectar cualquier problema o irregularidad y el mejor modo para solucionarlos.
Más información:
– RODRIGUEZ ESCANCIANO, Susana, “Las relaciones laborales ante las nuevas tecnologías: consideraciones sobre un cambio irreversible en el ejercicio de los poderes empresariales”, X Congreso Europeo de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, Sevilla, España (21 al 23 de septiembre de 2011).
1 comentario en «Las redes sociales en el trabajo del detective privado.»
Interesante post, las redes sociales son una gran herramienta para los detectives que consiguen información valiosa en ellas. Esto es así porque muchas personas dejan sus perfiles públicos, por lo tanto, cualquiera puede acceder a ella.